Tipos de yoga para hacer en casa: descubre estos 3 estilos diferentes

Aprende a hacer los tres tipos de yoga desde casa y tonifica tu cuerpo

A parte de mejorar la elasticidad y la respiración, ayuda a encontrar un equilibrio interno con la unión entre cuerpo y mente. Pero, ¿cuántos tipos de yoga existen? Te proponemos algunos tipos de yoga para hacer en casa.

Tipo de yoga para hacer en casa #1: Hatha yoga para principiantes

Es el estilo más clásico del yoga. El hatha combina la postura y la respiración para llegar a un estado de realización personal pleno. Para que ello se cumpla, es necesario trabajar el karma, es decir, ejercer un servicio empático y desinteresado a los demás.

Pero lo que aquí nos interesa es la actividad física. En una clase de hatha, los ejercicios consisten en un precalentamiento, realizar el saludo al sol o suyra namaskar, los 12 asanas y una actividad de respiración y relajación llamada savasana. Las sesiones habituales son de unos 90 minutos y pueden adaptarse a las personas de todas las edades.

Tipo de yoga para hacer en casa #2: Kundalini yoga medita sobre los chakras

La disciplina kundalini abarca distintas posturas, ejercicios de respiración y de meditación. Su práctica promueve equilibrar los puntos energéticos del cuerpo llamado chakras para generar un estado de plenitud y conciencia. Además, los ejercicios pueden variar según el estado de ánimo.

Una clase de yoga kundalini suele alargarse alrededor de una hora y media; y entre sus beneficios destaca la mejorsa del sistema digestivo, nervioso, cardiovascular, linfático, glandular y todo el cuerpo en general. Y es que estos ejercicios generan un balance hormonal y una reducción de toxinas. Tanto niños como mayores pueden realizar kundalini yoga.

 

Tipo de yoga para hacer en casa #3: Iyengar yoga alta exigencia

El estilo de yoga llamado Iyengar busca alcanzar la perfección de las posturas corporales siguiendo unos ejes alineados. Este método requiere de una gran concentración e introspección. La exigencia, por lo tanto, es mayor que en las otras disciplinas mencionadas.

Las clases de Iyengar empiezan con una recitación de un mantra, sentado en postura de meditación y limpiando la mente de las preocupaciones rutinarias del día. Acto seguido, se procede a higienizar el sistema respiratorio y trabajar la columna vertebral. De este modo se reduce el estrés y la presión. Se recomiendan dos sesiones semanales.

Una clase de Iyengar comienza con una recitación de un mantra a Patanjali, sentados en postura de meditación, buscando concentración y limpiar la mente de las actividades del día. Se procede a higienizar el sistema respiratorio y hacer un trabajo de inversión en columpios para soltar la columna. Las clases no se planifican previamente, porque la clase la plantea el alumno, y ninguna se parece entre sí. Sirve para elongar, mejorar la postura de la columna y la respiración. Además, disminuye el estrés y baja la presión. Las clases duran una hora y media y la puede hacer cualquiera, idealmente, dos veces por semana.

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